La Facultad de Medicina inicia su tercera semana de docencia cien por cien en línea

Dos semanas después del paso a la docencia online a raíz de la suspensión de la actividad académica presencial por coronavirus, el grado en Medicina, como el resto de grados de la Universidad de Vic - Universidad Central de Cataluña (UVic-UCC), continúa sus clases a través de varios recursos y plataformas digitales, con el campus virtual como eje central de relación y contacto entre el profesorado y el alumnado. El cambio se hizo a raíz de la declaración del Govern de Cataluña pidiendo el confinamiento de la ciudadanía por la emergencia sanitaria del Covid-19 y se implantó ya el primer día de entrada en vigor de las medidas. En el caso de la Facultad de Medicina, todo el alumnado desde primero hasta tercer curso sigue las clases a través de la plataforma Zoom, donde se llevan a cabo en el horario presencial habitual.

El mismo recurso se utiliza para los diferentes talleres y sesiones de análisis de casos clínicos, entre otros, mientras que la herramienta colaborativa Microsoft Teams permite realizar tutorías y facilita el contacto directo entre docente y alumno. El profesorado también utiliza el Moodle para hacer llegar a los estudiantes todo el contenido de las diversas asignaturas y sesiones.

En el caso de tercer curso, el reto es doble, porqué en el marco del desarrollo del grado esta es la primera vez que en la Facultad se imparte la asignatura de "Sistemas de Provisión, procesamiento y eliminación III: Agua, Electrolitos y excreción", es decir, el temario dedicado a nefrología y urología, que termina el próximo 3 de abril. En este contexto, el alumnado de tercer hizo llegar la semana pasada una carta de agradecimiento al profesorado de esta asignatura: "Están en las trincheras cada día, luchando por el bienestar de sus pacientes y en una época muy complicada, y a pesar todo nos reciben cada tarde con todo el material preparado, una gran profesionalidad y motivación, y nos transmiten esta actitud día a día", dicen los estudiantes.

Balance positivo de la primera quincena

Más allá del grado en Medicina, el resto de facultades y grados de la UVic-UCC también se han ido adaptando al nuevo contexto de docencia virtual: "Tenemos asignaturas de muchos tipos, y algunas han implicado cambios profundos y complejos, y tanto los docentes como los estudiantes han mostrado una gran predisposición para adaptarse a la nueva situación", valora el vicerrector de Profesorado, Albert Juncà, que hace un balance muy positivo de estos primeros quince días.

Juncà explica que "como el escenario de paro de clases presenciales se veía probable, días antes de que pasara desde el Rectorado ya se empezó a trabajar para afrontar la situación", y es por eso que el mismo día en que se anunció la suspensión de la docencia presencial "todo el profesorado ya recibió las primeras indicaciones, que se han seguido transmitiendo vía decanatos y jefes de estudio de forma constante". Para el vicerrector, ha sido esencial "que cada grado y cada asignatura hayan estudiado cuáles eran las mejores adaptaciones para su caso concreto" y que el Área de las TIC, la Unidad de Soporte a la Docencia y el Vicerrectorado de Ordenación Académica (VOA) hayan "trabajado a fondo para dar respuesta a las necesidades formativas del profesorado de manera rápida y concreta".

El vicerector afirma que "los docentes han respondido de manera modélica al nuevo contexto y trabajan para mantener en lo posible la planificación académica prevista". También recuerda que el principal cambio que se ha tenido que afrontar ha sido metodológico (el paso de la presencialidad a la virtualización) y que también ha sido "la alta capacitación pedagógica de nuestros docentes" lo que ha contribuido a hacerlo lo posible en buena medida. Parte de las actividades, las de carácter más práctico, se han tenido que reorientar o, en algunos casos, posponerse por más adelante. Los profesores de muchas asignaturas que dependen de un entorno físico como los laboratorios "han tenido que agudizar el ingenio, la creatividad y la experiencia docente", afirma.

Para facilitar al máximo el salto a la docencia en línea, se han elaborado una serie de materiales, recursos e indicaciones dirigidas al profesorado aglutinados en una guía que, según la vicerrectora de Ordenación Académica, Cristina Vaqué, "recoge las buenas prácticas a la hora de plantear alternativas online a las actividades docentes presenciales". De forma periódica, además, se organizan sesiones virtuales de apoyo a la docencia dirigidas al profesorado, donde se plantean dudas, alternativas, casos de éxito y soluciones en este sentido.

Respuesta modélica del alumnado

La respuesta del alumnado al nuevo contexto también ha sido buena, afirma Juncà, quien recuerda que "muchos ya estaban familiarizados con los entornos virtuales y sus dinámicas”. El vicerrector explica que la asistencia y la actitud a las clases es alta y positiva, y la respuesta a los foros y actividades propuestas es masiva en la mayoría de asignaturas. "Hemos constatado que la actividad y la conectividad de los estudiantes en las aulas virtuales se ha disparado", añade.

En la herramienta colaborativa Microsoft Teams que, entre otros, profesores y alumnos utilizan para hacer tutorías, se registran más de 7.000 mensajes y una media de 300 videollamadas diarias. En cuanto al uso del Campus virtual, "el tráfico ha aumentado significativamente porque, a pesar de entrar el mismo número de personas, éstas están conectadas mucho más tiempo de lo habitual, porque el trabajo no lo hacen en las aulas físicas sino en las virtuales ", explica Joan Busquiel, director del Área TIC.

"Adaptar la docencia de un día para otro sin saber hasta cuando se alargará crea inquietud a todo el mundo y supone una carga de trabajo extra", reconoce el vicerrector de Profesorado, que recuerda que muchos docentes tienen que hacer frente a este reto a la vez que cuidan de los hijos o de personas mayores a cargo. Sin embargo, asegura Juncà, la sensación que se palpa también es de satisfacción al ver "cómo hemos sido capaces en un tiempo récord de adaptar buena parte de las asignaturas en el formato no presencial". Para el vicerrector, este salto inesperado a la docencia virtual que la Universidad se ha visto obligada a hacer "nos habrá servido para sacudirnos algunos miedos para, en un futuro, tener claro de qué manera los recursos de la docencia no presencial pueden ser un muy buen complemento a la presencial".